SANTIAGO DEL ESTERO.- Un bebé de 11 meses, que hace poco había aprendido a caminar, murió tras caer a un balde con agua, en el paraje San Pablo, población rural del departamento Copo, distante a 250 kilómeros al norte de la capital santiagueña.
Voceros policiales señalaron que la víctima, cuya identidad no fue proporcionada, cayó al recipiente con 20 litros de agua, en circunstancias en que se encontraba jugando en los fondos de la precaria casa en la que vivía junto a su madre Mabel Risso, de 19 años.
Auxiliado por sus familiares, el pequeño fue trasladado al hospital zonal, pero ingresó sin signos vitales. Examinada por un médico de Sanidad Policial, se diagnosticó que el bebé falleció de "asfixia por inmersión". Télam